La jefa del Departamento de Nefrología del Instituto Nacional de Cardiología "Ignacio Chávez", la doctora Magdalena Madero, aseguró que la situación en los hospitales de la Ciudad de México es crítica: "estamos en guerra".
"En el Instituto Nacional de Cardiología tenemos ya la terapia intensiva para COVID llena, con 32 pacientes graves, con un total de 51 pacientes COVID, que es en realidad nuestra capacidad total. A pesar de que nos convertimos a ser hospital COVID hace dos semanas".
Dijo que hasta el día de hoy no tienen ni un solo ventilador disponible, “Estamos ya por tomar medidas drásticas, como se hace en otras instituciones, donde tendremos que implementar semáforo para decidir a quién se le dará el apoyo y a quién no. Aquellos pacientes que tengan pocas posibilidades de salir adelante se les dará tratamiento paliativo -sedación- por compasión".
Menciono que los hospitales en la Ciudad de México están rebasados y aclaró que las estadísticas de camas disponibles que dice el gobierno es a nivel nacional, pero "aquí no hay", también que hay lista de espera en las instituciones públicas incluso para la aplicación de oxígeno por fosas nasales.
Magdalena Madero, dijo que falta una semana para llegar al pico de contagios de Covid-19 y después de ese periodo empezará a descender si se cumple la medida ‘Quédate en casa’, pues se han perdido a muchos colegas en la batalla contra Covid-19, puesto que el 15 por ciento de los contagiados pertenecen al personal de salud.
"Estamos ya en una fase crítica donde hemos sido todos llamados a atender al área Covid", explicó la doctora, destacando que el personal médico se encuentra desgastado y fatigado por la situación. Atender el área de emergencias del área Covid-19 incluye no beber agua o no ir al baño durante 8 horas. Por otro lado, no cuentan con el equipo necesario para protegerse y en algunos casos es porque lo han pagado con sus propios recursos.
Finalmente, la especialista descartó que se esté aplanando la curva de contagios como expresó el presidente Andrés Manuel López Obrador, pues se hacen muy pocas pruebas. "Yo nunca pensé que íbamos a vivir algo así", indicó. "¿Cómo puedes decir que se está aplanando la curva, cuando estamos viendo lo que estamos viendo en los hospitales, y cuando estamos haciendo este número de pruebas, se me hace imposible?", finalizó.
