Este lunes, empresarios de la zona conurbada Veracruz-Boca del Río e integrantes de la sociedad civil, exigieron a la Secretaria de Hacienda la disminución en el costo de la energía eléctrica, así como una medición apropiada del servicio energético.
Indicaron que debido al aumento desmedido del costo de energía eléctrica ya ha habido cortes de personal así como la no contratación de nuevos empleados.
Señalaron que si para el primer trimestre de 2019 no disminuye la energía eléctrica, podría haber cierres de negocios.
Los manifestantes mencionaron que ya han aplicado medidas para intentar disminuir el consumo de energía eléctrica como apagar las luces en determinadas horas, acortar horarios de servicio y cerrar más temprano pero en lugar de notar una disminución en el costo, han registrado incremento en sus tarifas.
Aclararon que de momento no han pensado en interponer una acción legal contra Comisión Federal de Electricidad (CFE), pero mencionaron que próximamente anunciarán nuevas medidas ante el incremento de energía eléctrica.
Los empresarios de la zona conurbada Veracruz-Boca del Río e integrantes de la sociedad civil alzaron la voz para exigir a la Secretaría de Hacienda la disminución en el costo de la energía eléctrica.
Exigieron una tarifa homologada a nivel nacional, así como una medición apropiada del servicio energético.
Piden a funcionarios locales, estatales y federales que están por terminar sus encargos -y a los que ya han sido nombrados y están por iniciar su gestión- para que de acuerdo a sus atribuciones contribuyan a resolver el grave problema del alza en las tarifas.
“Nos hemos reunido representantes de más de 100 colonias, instituciones educativas, cámaras y organizaciones que desde hace más de un año hemos levantado la voz de manera sistemática y desde cada uno de los sectores, para denunciar las afectaciones que hemos registrado debido al incremento de hasta el 100 por ciento en nuestras tarifas de uso doméstico, comercial o industrial”, empresarios.
Indicaron que la situación ha desbalanceado nuestro presupuesto anual, ha trastocado nuestra planeación de actividades de producción o expansión y nos ha llevado a registrar pérdidas que ponen en riesgo la fortaleza de las empresas y la oportunidad que estas representan para todos los que ahí colaboramos y nuestras familias de tener un sustento digno y una vida de tranquilidad.
“Quienes apoyamos este posicionamiento, sabemos que las tarifas establecidos por la Comisión Reguladora de Energía (CRE) están basados en los costos de producción y distribución del servicio y en una variación mensual de los precios de los combustibles (…) La anterior es una fórmula incompleta, pues en los costos de generación de energía se trasladó a los consumidores el costo de las ineficiencias de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), el robo de energía, los pasivos de miles de consumidores que disfrutan del servicio y no lo pagan, así como el derroche y el saqueo de recursos que padecen las empresas paraestatales”.