Este lunes, se dio a conocer que la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) mediante la dirección jurídica, aceptó la recomendación con número 06/2021 de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) emitida debido a la violencia, hostigamiento y acoso laboral que recibió la trabajadora, Silvia Núñez Hernández, de parte de la ahora ex delegada regional, Diana Santiago Huesca.
A través de un escrito la directora de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), Elba Elena González Fernández mencionó “Me permito hacer de su conocimiento que, se recibió oficio número SEV/DJ/DLyC/1441/2021, a través del cual el Lic, Jaziel Cabrera Pacheco, director Jurídico de la Secretaría de Educación de Veracruz, informa a este Organismo que al Recomendación 06/2021, que el fuera plantada con motivo de su queja, ha sido aceptada. En consecuencia, esta Dirección llevará a cabo el seguimiento correspondiente, cuyo resultado se le informará en su oportunidad”.
Mediante su columna la también periodista, Silvia Núñez Hernández, la cual fue titulada “Con más pena que gloria, se va Diana Santiago Huesca de la Delegación Regional de la SEV”, narró los hechos de hostigamiento que la ex delegada hizo hacía su persona, como retirarla de su escritorio, silla y archivero, además de ‘cobrarle’ supuestas fallas que cometió presuntamente en administraciones pasadas.
Asimismo acusa que la ex delegada regional de la SEV, Diana Santiago Huesca le retenía la mitad de su salario, “Cobardemente argumentó que no era ella, cuando una servidora conoce (por haber sido parte de un equipo cercano a los delegados en administraciones pasadas) que quién emite los descuentos al personal a su cargo, es el delegado. No me lo hizo una sola ocasión, me lo hizo en varias (pese a que demostré con la Ley Federal del Trabajo en mano, que ese acto era ilegal, pues un patrón tiene sólo 30 días para descontar faltas), solicité a través de oficios al Secretario de Educación Veracruz, Zenyazen Escobar García, la devolución de esos descuentos, pero jamás ese dinero me fue rembolsado y literalmente me robaron aproximadamente seis mil pesos”.
Señaló que Diana Santiago Huesca, la envió al área de estadísticas, congelándola laboralmente “Mes con mes, pasaba el concentrado de productividad de cada trabajador a las diversas jefaturas (no era el único trabajador con congelamiento laboral) donde aprovechaba para demostrar a las autoridades educativas sobre nuestra “incapacidad” laboral y amenazar hasta con quitarnos nuestra plaza (de hecho juró que me la quitaría aunque fuera lo último que hiciera). Mes con mes, registré en dichas hojas, que mi falta de productividad correspondía al hostigamiento, acoso y abuso de autoridad hacia mi persona de parte de la delegada. Hojas signadas, que tenía que enviar a oficinas centrales y que posteriormente como respuesta de su intolerante actitud, originaban una campaña de agresiones de parte de sus incondicionales, al sentirse evidenciada”.
La trabajadora Silvia Núñez público en su red social:
Impresionante y lamentable que las peores violencias que una mujer puede recibir es de parte de otra mujer.
Hoy les envío un mensaje a mis compañeros y a todos los trabajadores y trabajadoras de las dependencias públicas, que callar una acto discriminatorio, un acto violatorio de tus derechos humanos, se tiene que denunciar. Un servidor público, debe de ser denunciado ante las instancias correspondientes. Como trabajador del estado, se tienen responsabilidades (y muchos) pero muchos más derechos. El servidor público, tiene que manejarse con liderazgo, pero siempre respetando la dignidad de las personas a su cargo.
Diana Santiago Huesca, renunció a su cargo para aspirar a una diputación y piensa, que con ese hecho, su responsabilidad sobre todas sus bajezas que perpetró en contra de una servidora, le serán heredadas a la SEV sin consecuencias para ella. Quienes la protegen, quienes la promueven y la apoyan, tienen que considerar que la señora Santiago Huesca, tiene un problema de actitud y un diagnóstico de personalidad muy remarcado, que tiende a discriminar, a pisotear y denigrar al personal a su cargo.
En este día, donde se "conmemora" a la mujer, puedo argumentar que no podremos hacerlo, hasta que se deje de normalizar la violencia en las dependencias públicas. Espero, que la SEV haga lo correspondiente y a los compañeros, no permitan jamás que los violenten. Hay instancias y hoy les pongo el ejemplo de que si funcionan. Aquí la historia:
